Las empresas públicas pueden recaudar fondos del público general en Australia mediante la emisión de valores haciendo la divulgación necesaria o bajo una exención a dicha divugación.
Las empresas propietarias están limitadas a captar fondos de sus accionistas y trabajadores, y del público en general solo si la recaudación de fondos está exenta del requisito de un documento de divulgación o a través de financiación basada en capital (equity-based) de financiamiento de fondos de fuentes múltiples (CSF, por sus siglas en inglés, crowd-sourced funding).
Para una descripción de las empresas públicas y propietarias, consulte el Capítulo 3 de esta publicación, "Estructuras Comerciales".
A partir de septiembre del 2017, Australia ha tenido un régimen de financiamiento de fondos de fuentes múltiples (CSF, por sus siglas en inglés, crowd-sourced funding) basado en capital (equity-based) para facilitar el acceso al capital a pequeñas y medianas empresas públicas australianas no cotizadas (y desde octubre de 2018, empresas propietarias australianas) reduciendo los requisitos regulatorios y de divulgación para hacer ofertas públicas de acciones, buscando garantizar protecciones adecuadas para inversionistas minoristas. El régimen de CSF permite a las empresas australianas elegibles, a aquellas con menos de $25 millones de dólares australianos de activos brutos consolidados y menos de $25 millones de dólares australianos de ingresos anuales, recaudar hasta $5 millones de dólares australianos en un período de 12 meses. El régimen CFC limita a $10.000 dólares australianos la cantidad que un inversionista individual puede invertir en una sola compañía.
Los esquemas de inversión administrada (managed investment schemes) (por ejemplo, fondos de unidad (unit trusts) y otros esquemas de inversión colectiva) pueden recaudar fondos del público en general en Australia emitiendo unidades (units) u otros derechos mediante la divulgación apropiada o bajo la exención de divulgación. Se requiere que el administrador del fondo (trustee) de dicho esquema tenga una Licencia de Servicios Financieros de Australia emitida en virtud de la Ley de Sociedades que lo autorice a ser una “entidad responsable” de dicho esquema.
Cuando las participaciones en los esquemas de inversión administrada se ofrecen al público en Australia, el proceso de establecer la estructura de inversión, la administración y gestión continua de la estructura y la oferta de productos financieros son todos regulados por la Ley de Sociedades. en particular por los requisitos del régimen de la Licencia de Servicios Financieros de Australia (Australian Financial Services Licence) y de las obligaciones de dicha licencia. Las consideraciones tributarias son un elemento importante para determinar si, y cómo, establecer tales estructuras. El establecimiento de tales estructuras y la oferta de tales productos financieros requieren una asesoría y consejo legal (u otro) profesional experimentado.
Valores y otros productos financieros pueden ser ofrecidos en Australia por entidades extranjeras de conformidad con los requerimientos australianos de divulgación o bajo alguna exención de divulgación como por ejemplo ventas al por mayor o inversionistas profesionales. La promoción de ofertas de valores o productos financieros en Australia se rige también por elementos del régimen de la Licencia de Servicios Financieros de Australia. Entidades extranjeras que estén considerando realizar ofertas en Australia requerirán soporte y asesoría experta profesional legal y de otros tipos.
Las acciones, obligaciones (debentures) y derechos en esquemas de inversión administrada pueden cotizarse en la Bolsa de Valores de Australia (ASX, por sus siglas en inglés, Australian Securities Exchange).